lunes, 27 de agosto de 2012

Capítulo 9


CATELYN
Su padre la había llamado a su presencia con una urgencia rara en él. Lord Hoster Tully era una persona muy metódica, odiaba los imprevistos. Por esa razón, Catelyn se sorprendió por la celeridad con que requería ver a su hija, sin tiempo apenas de arreglarse para ver a su padre. Estuvo lista en escasos minutos gracias a la ayuda de dos sirvientas y pronto se presentó en el salón principal.
Lord Hoster mostraba un rostro taciturno. Cat creyó que estaba enfermo y le preguntó si se encontraba bien. Su padre pareció salir de un trance y sonrió con cariño a su hija, mirándola de forma peculiar, como si fuera una extraña. La muchacha empezó a preocuparse seriamente e insistió en su pregunta. «Sí, sí, no ocurre nada. Sólo estaba sumido en mis pensamientos.» Desde que murió Lady Minisa Whent, su madre, la salud de Lord Hoster había sufrido un pequeño deterioro y Catelyn temía que su hermano tuviera que asumir demasiado pronto el gobierno de Aguasdulces. Ser la señora del lugar no era ni mucho menos una responsabilidad tan grande como ser el señor, aunque requería un esfuerzo supremo para una muchacha joven como ella. De cualquier modo, sentía que no estaba lejos el día en el que se casaría y a veces se preguntaba a qué esperaba su padre para anunciar su compromiso con algún caballero de las numerosas casas de Poniente.
Todo esto pensaba Catelyn mientras su padre le hablaba de un viaje corto que tenía que realizar para tratar asuntos que afectaban a la región de los Ríos. A Cat no le interesaba la política ni entendía nada de acuerdos, tratados o alianzas, así que simplemente se dedicó a escuchar con aparente atención pero sin enterarse realmente de nada. Lo único que importaba era que Aguasdulces quedaba a su cargo por el momento. Era en situaciones como ésta cuando Catelyn echaba de menos la presencia de su tío Brynden, el autoproclamado Pez Negro, que rehusaba obedecer cualquier mandato de su hermano. Su negativa a casarse por interés motivó un conflicto entre dos hermanos que habían sido uña y carne. Cat no podía imaginar una situación semejante entre ella y Lysa. Se querían como si fueran gemelas, no permitiría jamás que algo así ocurriera entre ellas.

2 comentarios:

  1. Vaya demasiada responsabilidad para la joven Cat, no dudo que en cualquier momento se concerte el ansiado matrimonio, ahora comprendo mejor el porque de su seriedad y formalidad, tenía que ser así, no poseía la libertad de su hermana Lysa, veremos que pasa con estos amigos, quisiera saber porque se distanciaron tanto, gracias Athena. ^^

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  2. Ya lo irás viendo ;) Gracias por todos tus comentarios.

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